TRADUCTOR DE LA PAGINA EN OTROS IDIOMAS

martes, 8 de marzo de 2011

15 de mayo


¡Cómo se parecen las Palabras del Señor a un hermoso collar de perlas!

¡La Palabra de Dios es una fuente absolutamente inagotable de sabiduría y conocimientos, y constantemente descubre uno en ella «tesoros nuevos y viejos»! (Mat.13:52) Soporta miles de lecturas, y el que con más frecuencia la repasa es el que con mayor seguridad descubre en ella nuevas maravillas. ¡Cada vez que ahondamos en la Palabra extraemos montones de inapreciables verdades!
¡Pero esas perlas de conocimiento no son nada sin el Espíritu! Por mucho que estudies, hace falta el Espíritu y la mano de Dios para ensartar las perlas de Su Palabra y juntarlas en su debido orden, bien arregladas, formando un conjunto útil; ¡un espléndido y hermosísimo rosario de verdades que adorne nuestros pensamientos y corazones en su debido orden, secuencia, tamaño, importancia y belleza! En eso se diferencian el conocimiento y la sabiduría: ¡la sabiduría consiste en saber aplicar los conocimientos que se posee! Es saber emplear los conocimientos de la Palabra de Dios con fines útiles.
No desprecies, pues, las bellezas, las riquezas y los tesoros de la Palabra de Dios. ¡Y sobre todo pídele sabiduría a Dios! «Ante todo, adquiere sabiduría.» ¡Es mejor que el oro! (Pro.4:7; 16:16)

No hay comentarios:

Publicar un comentario