Bajo el sistema del Nuevo Testamento, Dios ya
no nos exige sólo un diezmo del 10% como en la época del Antiguo Testamento.
¿Sabes lo que exige ahora? ¡El 100%! El espera que des tu vida entera y
todo lo que posees para el Señor; que le rindas servicio a tiempo completo,
todo lo que puedas! ¡Dar el diezmo es la segunda opción! ¡Es una salida fácil
para los que no están dispuestos a entregarlo todo!
¡Pero hay quienes sirven al Señor a tiempo
completo, que dedican todo su tiempo, sus energías y todo lo que tienen a
predicar el Evangelio, y además diezman cualquier ingreso que Dios les da! ¡Son
"cientodiezmeros"! ¡Pues de hecho ya dan su 100% y encima de eso dan
el 10% de sus ingresos! ¡Dedican toda su vida, su tiempo y sus fuerzas a servir
al Señor en todo momento y además diezman el 10%!
Esas personas muy bien podrían decir: "Le
estamos dedicando todo nuestro tiempo al Señor y al servicio de Dios! Todo va a
la Obra del Señor. ¡Ya hemos renunciado a todo! ¿Qué nos queda por dar?"
Pues bien, los discípulos de Jesús también habían renunciado a todo, sin
embargo El les dijo: "¡De gracia recibisteis, dad de gracia!"
(Mat.10:8)
¡Son los cientodiezmeros! ¡Los que dan el 100%
de sus vidas y el 10% de sus ingresos! ¿Eres tú uno de ellos?
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