¡En qué desastre puede terminar el hombre o cualquiera de las
criaturas de Dios cuando no siguen las leyes divinas y desobedecen a Dios y
hacen lo que les place! ¡Este mundo está dando hoy mismo una lección y una
ilustración a todo el Universo de hombres y ángeles, demostrándoles el desastre
que puede llegar a ser una criatura de Dios cuando se le permite obrar a su
manera!
¡Dios sabe lo que está haciendo! Está
permitiendo que el hombre llegue al límite de sus propias fuerzas para hacerle
ver simplemente que el hombre no puede resolver sus propios problemas y que no
puede arreglárselas sin Dios. Lo mismo que hizo con Adán y Eva, ¡Dios dejará
que el hombre haga de las suyas, según su libre albedrío, hasta que por poco
llegue a arruinar el mundo entero! ¡Es la única forma en que El puede cumplir
Su objetivo y presentar su mensaje gráfico del bien y el mal como ejemplo
perpetuo para todos nosotros!
Pero al mismo tiempo El demostrará lo
maravillosas que pueden llegar a ser las criaturas Suyas, que sin ser obligadas
a adorarle, optan por hacerlo voluntariamente: nosotros, Su pueblo elegido que
lo hemos escogido a El. ¡De ese desastre El separará un pueblo para Sí, al que
verdaderamente pueda amar y demostrarle Su Amor! ¡La escena final luce con gran
resplandor frente a ese negro telón de fondo! Y eso es lo que debemos esperar
con ilusión, ¡la luz al final del túnel! ¡Gracias, Señor!
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